
El lado izquierdo de nuestro cerebro, de donde emana esta energía, remueve los cimientos de nuestra personalidad profana para activar el mecanismo que nos permite corregir los desmanes que hayamos podido cometer bajo el imperio de los sentidos (Venus).
Hod ha heredado el pensamiento activo de Binah y es el encargado de legislar, de discernir lo que es lícito de lo que no lo es, en lo referido a nuestro programa humano. Tal como reza la ley hermética «Como arriba es abajo», Mercurio-Hod es el guardián de esta analogía. Gracias a sus radiaciones, podemos descubrir los secretos de los dioses. Como se trata del último Séfira de la columna de la izquierda, constituye el último eslabón de la cadena del escenario de nuestras experiencias. El aprendizaje no será fácil, por la vía del dolor, pero Hod insuflará a nuestro paisaje humano chispa, creatividad y una gran capacidad de análisis. En la leyenda mitológica, Hod-Mercurio-Hermes era hijo de Hesed-Júpiter y hermano de Apolo-Netzah.



Hemos librado muchas batallas con nuestras tendencias internas y con su proyección al exterior y es tiempo de realizar un análisis aplomado de la situación resultante. ¿A quién hemos ofendido en nuestro afán indiscriminado por competir y por qué? Esa podría ser una buena pregunta a formularse.
Es el momento de recurrir a la lógica y la razón, permitiendo que la inteligencia penetre en nuestros proyectos y nos ayude a superar las fases emocionales y los impulsos instintivos.
Es tiempo de soltar las amarras que nos unen al pasado y de hacerlo de forma consciente, como resultado de una reflexión muy madurada y de un análisis pormenorizado de las actitudes abandonadas y superadas a lo largo del camino.
Si quieres obtener tu Árbol de la Vida personalizado haz clic aquí
Tristán Llop
1 comentario:
Tengo en Hod mercurio, marte y plutón. Me siento muy identificada con lo que dice de la verdad y lo que es lícito y no lo es, practicamente ese es el motivo de la mayoría de mis "problemas" en esta vida. Es como si tuviese muy claro que hay cosas que están bien y las que están mal hay que corregirlas, pero a la vez no quiero meterme donde no me llaman y quiero respetar a los demás ¿Quién soy yo para corregir a nadie? Pero luego la vida me regala anécdotas como que soy correctora en una página de críticas de cine o fui correctora batante tiempo en unos cursos online. Por lo tanto debe formar parte de mi programa el corregir. Espero saber hacerlo con corrección.Quiero aprender a corregir con justicia y sin meterme donde no me llaman.
Por otra parte soy muy sincera.
Publicar un comentario