La astrología y los niños

(Fotografía de Silvia Smith)Iniciamos aquí la publicación de una pequeña serie de artículos que escribió Kabaleb sobre los niños en relación con la astrología (ya se ha sido publicado en el blog de Kabaleb pero lo repito aquí para que llegue a más gente).

Así veremos la influencia de cada signo en el desarrollo de los hijos; los niños de Fuego, de Agua, de Aire y de Tierra; qué será mi hijo de mayor; la falta de afinidad entre profesor y alumno; armonía y desarmonías entre los padres y los hijos; la sociedad del futuro juntará los niños por afinidades temperamentales; las 3 grandes etapas de la niñez; Principales virtudes y defectos de los niños según su signo...

Influencia de cada signo en la vida de los niños

Aries (21 de marzo al 20 de abril).

De entre todos los pertenecientes a signos de fuego, los Aries serán los niños más abiertos, espontáneos, fogosos, necesitados de protagonismo y buscadores de aventuras. Es el abanderado, el jefe de filas, el que se responsabiliza de los destrozos que los juegos puedan ocasionar. Necesita hacerse notar, y si no lo consigue por las buenas, lo conseguirá por las malas, mediante travesuras, trastadas, suscitando así las reprimendas de profesores y familiares, que propiciaran la hora dulce de la reconciliación.

Si tenéis un niño Aries, otorgadle vuestra confianza, estad a su lado pase lo que pase, porque de esta forma no se sentirá impulsado a reclamar vuestra atención mediante gestos heroicos y peligrosos. Estimulad su entusiasmo, su hidalguería y él os devolverá multiplicado ese amor que debe alcanzar límites sobrehumanos.

Tauro (21 de abril al 20 de mayo).

Son niños tranquilos, apacibles, a los que ni un terremoto consigue sacar de su placidez. Generalmente, suelen encarnarse en familias adineradas, porque son rentistas natos, pero si vienen al mundo en familias pobres, con toda seguridad encontrarán el camino que les conducirá a la opulencia, aunque lleguen a ella tarde en la vida, porque la dinámica del signo entra en plenas funciones a partir de la mitad de la vida.

Que las familias no esperen de ellos grandes éxitos en los estudios, ni tampoco se los exijan, porque no van a necesitar lo que aprendan para triunfar en la vida. El dinero y el triunfo social los buscará dondequiera que estén, porque llevan la suerte encima. Si en tu casa hay un niño Tauro, hazle rellenar los boletos de la primitiva, porque puede hacer que la fortuna entre en tu casa.

Géminis (21 de mayo al 21 de junio).

Los niños de Géminis son los que más aparentan inteligencia, porque la exteriorizan, la sacan fuera. Son los portavoces natos de sus camaradas. Si hay algo que decir, en la escuela o en otros ambientes, ellos serán quienes lo digan. Son respondones natos y ellos dirán la última palabra, aunque les valga un castigo. Brillarán por sus palabras, por sus escritos, aunque pueden tener problemas en memorizar las lecciones.

Lo suyo no es interiorizar conocimientos, sino soltar los que ya llevan dentro, y ello hace que muchas veces respondan algo parecido a lo que se les pregunta pero en sus respuestas hay tanto método, tanta lógica, que el examinador puede dar por válido lo que dicen. Son niños que parecen adultos por su forma de razonar, pero con poco sentido práctico, que es la cualidad que sus familiares deben desarrollar.

Cáncer (22 de junio al 22 de julio).

Los niños de Cáncer son los más sensibles de todo el zodíaco. Llevan encima un potencial emotivo de alta intensidad y ello les hace percibir del mundo su ensueño, su poesía; les hace ver la parte ideal de las personas, de modo que las idealizan, las endiosan, y si no responden a lo que esperan de ellas, se cierran, se marginan en su torre de marfil y se desentienden de todo.

Necesitan más afecto y más confianza que cualquier otro signo. Si encuentran en sus profesores y familiares una respuesta simpática, serán las más deliciosas criaturas del mundo, capaces de todo por complacer a quien los quiere. La indiferencia hará de ellos seres extraños, incomprensibles, encerrados en el mundo del silencio que es el Agua.

Leo (23 de junio al 23 de agosto).

El niño Leo, a partir de los siete años, será un líder natural, en el que sus demás compañeros buscarán protección y ayuda. Hay en él una fuerza moral invisible que lo distingue, le da brillo y, ante los demás, es como un rey.

También sus profesores lo distinguirán, porque es el niño que acepta la autoridad de sus superiores; no es revoltoso, sino disciplinado y responsable. Pronto los mayores descubrirán que ese líder infantil es favorable a sus propósitos y le confiaran misiones representativas.

En el hogar, también será el líder de sus hermanos, aunque éstos tengan mayor edad, y será el más idóneo para asumir responsabilidades. Un Leo en casa protegerá el clan familiar.

Virgo (24 de agosto al 23 septiembre).

Los niños Virgo son los más pasotas del zodíaco, porque se encuentran al final de un gran ciclo, y van de salida, sin que el mundo que los rodea les concierna. Por estar al final de muchas cosas son los más sabios, los que más han desarrollado la inteligencia en todas sus fases, y no hay maestro que les supere, aunque su inteligencia sea un potencial a desarrollar, pero está allí, la poseen, inconscientemente saben que es así y ello les lleva a desinteresarse del rollo.

En el hogar, rehuirán igualmente las tareas, se las ingeniarán para no estar, pasando mucho tiempo fuera, pero siendo archivo vivo de todas las cualidades, en los grandes momentos de la vida, sabrán responder y lo harán con maestría.

Libra (24 de septiembre a 23 de octubre).

Los niños Libra son los perfectos compañeros, los perfectos agrupadores; los organizadores natos de bandas juveniles y equipos para los juegos. Son niños que huyen de la soledad como del diablo, y por ello se les verá siempre formando grupos, ya que poseen un talento organizador que pocos tienen.

En la escuela, se encontrarán siempre en el pelotón de los mejores, aunque les será difícil sacar deducciones prácticas de lo que aprendan. En el hogar, serán obedientes y muy activos si ven la lógica de aquello que se les pide pero si sus padres se comportan emocionalmente, Libra les volverá la espalda y sus reacciones pueden alcanzar altos índices de inconformismo. Con un Libra en la familia, la casa siempre estará llena hasta los topes de compañeros.

Escorpio (24 de octubre al 22 de noviembre).

Los niños de Escorpio son los más complejos y difíciles de entender, porque, siendo extremadamente emotivos, guardan dentro lo que les agravia, y esas emociones no liberadas pueden dar lugar a enfermedades o pequeños accidentes con los que de algún modo, inconscientemente, quieren llamar la atención.

Su amor propio es muy intenso y ello les llevará a valorarse por encima de lo normal, de modo que si los demás no los valoran en el mismo grado, se sienten incomprendidos y sufren mucho por ello. Constantemente deben ser desagraviados por cosas que les han pasado desapercibidas a sus familiares o profesores, los cuales al final se cansan de tantas delicadezas y el Escorpiniano no tiene más que irse a llorar a su rincón. A veces, una abuela todo miel consigue darles la alegría de vivir.

Sagitario (23 de noviembre al 21 de diciembre).

Los niños de Sagitario son los más intrépidos, los más aventureros del zodiaco. Devotos del capitán trueno o de Superman, sobre todo de Superman, experimentará la necesidad de realizar una hazaña diaria para salvar a alguien de algún peligro. Son niños-providencia, que muchas veces aportan realmente soluciones milagrosas a personas en apuros.

Lo cotidiano les interesa poco, incluidos los estudios, pero teniendo muy desarrollada la intuición, comprenderán en un abrir y cerrar de ojos lo que a los demás les cuesta un montón aprender, y despacharán sus deberes en un santiamén, para ir a los suyo, a lo intrépido, a la aventura. Es posible que se escapen de casa si encuentran en ella muchos obstáculos, pero será para vivir como los personajes de las historietas. En cuanto hayan movilizado un grupo para su busca y captura, volverán y allí no ha pasado nada. Su bondad es más fuerte que todo y no pueden ver a la agente sufrir. Participan en alto grado en el avatar ajeno y son magníficos ejemplares de humanidad.

Capricornio (22 de diciembre al 20 de enero).

Los niños de Capricornio son ponderados, responsables, lentos en sus reacciones, pero seguros de su andadura. Avanzan paso a paso con la parsimonia de un buldózer, con la seguridad de que llegarán donde se propongan. Esa lentitud puede llevarlos a los últimos puestos de la clase, pero que no se alarmen sus familiares, porque a medida que avancen en edad, como nada ni nadie los detendrá, llegarán a ser los primeros en la escala social.

Es importante pues que a este niño, llamado a ocupar los primeros puestos en la sociedad, no se le atosigue, no se le exijan resultados inmediatos. Dejadlo que sea el último en su etapa infantil y esperad confiados el período de los grandes triunfos.

Acuario (21 de enero al 19 de febrero).

El de Acuario es el niño sabio por excelencia; es el filósofo, el intelectual. Con una gran capacidad memorizadora, lo aprende todo, lo sabe todo, aunque quizá lo manifieste menos que su colega de Géminis, porque su vocación es la de ser eminencia gris y de dirigir el mundo entre bastidores.

No tendrá problemas escolares, y el peligro quizá le venga de ser demasiado inteligente, porque le gusta hacer experimentos de laboratorio y bien podría descubrir la bomba atómica sin saberlo, y volar la casa en que reside. Conviene pues que sus familiares lo vigilen y lo prevengan contra los excesos de inteligencia.

Piscis (20 de febrero al 20 de marzo).

Los niños de Piscis son los que más demuestran su simpatía, su afecto, y los más precoces en el capítulo del amor. Sus enamoramientos infantiles son frecuentes, pero de corta duración. Se enamorarán, claro está, del profesor o de la maestra y quizá lleguen incluso a escribirles cartas anónimas declarando su afecto.

Esos amores infantiles serán muy estimulantes para su trabajo, porque querrán quedar bien ante la persona amada. También en el hogar serán demostrativos en la expresión de su afecto y se harán querer por todos los que les rodean. Debería enseñárseles a ser constantes en sus afectos, pero éste es un capítulo difícil, muy difícil para ellos.
Kabaleb Talismanes y reflexiones para una nueva Era


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