Recetas con magia... para el amor, el estrés o la autoestima

Gracias a algunos magos de la cocina como Ferrán Adriá, podemos afirmar, cada vez con más rotundidad, que comer es un placer. Pero la mayoría de nosotros se siente incapaz de prepara un plato tan elaborado como los del gran chef internacional.

En cambio, sí podemos utilizar ciertos ingredientes mágicos que van a permitirnos mejorar nuestra autoestima, aumentar nuestro apetito sexual, o relajar un ambiente de tensión. Podemos ponerle un toque picante a nuestra vida, sin utilizar especies.

La cocina

La cocina representa, en el ámbito simbólico, el centro alquímico de la casa, porque allí tiene lugar la transformación de nuestros alimentos, de crudos a preparados (como en la alquimia pasan de los viles metales al oro). Esta es una razón de peso para cuidar siempre que este espacio sagrado esté limpio y podamos trabajar con cierto espacio. Como los olores interfieren en nuestro estado de ánimo, es preciso procurar que la cocina esté bien ventilada y poner en marcha la campana extractora antes de empezar a cocinar.

Cualquier ritual que se precie debe realizarse con una vestimenta adecuada. Para preparar un plato mágico será necesario ponerse el delantal de cocina y si disponemos de un gorro de chef, mejor. Aunque parezca peregrino, cuando alguien se viste para una ocasión, convierte ese momento en especial. Además, cuanto mayor sea el grado de concentración, mejores serán los resultados.

Receta para un buen apetito… sexual

Menú para dos.Antes de empezar a cocinar pon cuatro gotas de esencia de rosas en los 4 puntos cardinales del espacio que vayas a utilizar (ponlas encima de un platito).Concéntrate durante tres minutos en el objetivo que quieres conseguir (por ej. Tener una velada animada con tu pareja).

De primer plato puedes preparar unos espárragos con mayonesa. Pondrás un grupo de 5 espárragos a la izquierda, apuntando hacia un montoncito de mayonesa que pondrás a la derecha. (Los espárragos estimulan las hormonas sexuales).De segundo plato prepara un filete ( de carne o de pescado) a la mostaza con miel (la miel es afrodisíaco y atrae).

Pones aceite en una sartén a fuego vivo, salas el filete y le pones mostaza de Dijon sólo por un lado. Bajas un poco el fuego y pones la carne y cuando la hayas girado, pones una pequeña capa de miel por un lado y vuelves a girarla. Puedes acompañarla de unos pimientos a la brasa.
Y de postre un platito de fresas y frambuesas con unas virutas de chocolate alrededor.Lo demás deberás ponerlo tú…

Receta para subir la autoestima

En una investigación del National Institute of Mental Health, los científicos encontraron que los ácidos grasos omega-3 y la uridina, una sustancia natural encontrada en los alimentos, funcionan tan bien como los antidepresivos en la prevención de las señales de la depresión. También resultarán útiles para elevar la autoestima.

Empieza por realizar tres afirmaciones (antes de empezar a cocinar), del orden de: doy gracias por lo que tengo; doy gracias para que las cosas me salgan mejor; o como decía el guionista G. Tola a la actriz Carmen maura: “nena, tú vales mucho”. Luego repite 3 veces en voz alta (si es posible) mi guiso va a salir genial porque lo cocino con amor.Puedes empezar con una ensalada de col cruda, con tomate y zanahoria (el color rojo es el del planeta Marte y es el mayor transmisor de energía del zodiaco), aliñada con una vinagreta.

De segundo un salmón con piñones y pasas. Preparas primero una salsa con un poco de aceite, unas gotas de vinagre de Módena y una cucharada de moka de mostaza de Dijon. Una vez bien mezclados esos ingredientes, pones la salsa en una sartén caliente y le pones el salmón. Cuando veas que le quedan tres minutos, le pones los piñones y las pasas. Lo acompañas con unas patatas al horno.

De postre puedes servir unas rodajas de kivi con unas de naranja, mojado con un poco de zumo de naranja con azúcar (una buena carga de vitamina C.)Después de esta comida te sentirás mejor…

Receta para rebajar la tensión y el estrés

A menudo las cosas salen de forma distinta a como esperábamos y se generan situaciones desagradables, ya que nos descargamos con las personas a las que más queremos. La hora de la comida es un buen momento para rebajar el nivel de estrés.Este ritual te servirá para cualquier plato.

Antes de ponerte a cocinar, toma una rama de tomillo y quémala (con un plato debajo). Generará una especie de incienso que resultará purificador, repártelo por toda la cocina pensando que estás armonizando los alimentos que va a ingerir tu familia.

Cuando pongas la sal en el cocido que estés realizando, hazlo en tres veces: en la primera dices en voz alta (si es posible) Que la Luz ilumine este plato; que la Armonía lo condimente y que el amor lo corone.

Verás como el resultado es espectacular.
http://elarboldorado.com/productos/shungit-la-piedra-inteligente/

Las anécdotas, la letra pequeña de la vida

Cuando leemos un contrato, es fácil fijarnos en los puntos principales, dirigir nuestra mirada hacia lo que sabemos que está escrito. En cambio, se nos escapan a menudo los pequeños detalles, lo que llamamos “la letra pequeña”.

En la vida, sucede exactamente lo mismo. De forma continua pasamos por acontecimientos que tratan de llamar nuestra atención y en cambio los dejamos escapar como si nada tuvieran que ver con nuestra historia, son las anécdotas.

Las anécdotas son aquellos pequeños o grandes sucesos que tienen lugar todos los días, ese autobús que se nos cierra en las narices; ese tropiezo con la mesa (que lleva 10 años en el mismo sitio); ese accidente con el coche o la moto; ese derramamiento de leche, aceite, agua o vino; esa persona que nos llama por teléfono y se equivoca…

Las anécdotas tienen un significado, tratan de transmitirnos un mensaje, de ofrecernos una información relevante para nuestra evolución y nuestro avance y por ello es necesario descifrarla. En cuanto lo hacemos, dejan de repetirse y nuestra vida vuelve a la calma.

Las anécdotas nos acercan a la comprensión de nuestro objetivo de vida, nos señalan objetivos a seguir, porque recalcan aquello que debe ser pulido, nos ponen en el camino de la verdad.

Las anécdotas representan en sí un lenguaje que puede y debe ser interpretado. Para conseguirlo os propongo que participéis en el seminario que impartiré, que tendrá lugar el próximo sábado 1 de diciembre de 2007, en Barcelona, en Aurea’s Mon, calle Cerdenya 261 (junto a la Sagrada Familia). El horario será: de 10 a 14h y de 16 a 19h. Las inscripciones se pueden realizar a través del correo: nuevavibracion@ono.com o al tel. 687 509 748 (Tristán).

El precio del seminario irá en función de la gente que se inscriba. Es decir, con un grupo de 20 personas (que es el mínimo), saldría a 80€; si somos 30, bajaremos a 65; si somos 40, costará 55 y si llegamos a los 50 (máximo admitido), sólo costaría 50€.

El objetivo principal de este seminario es el de mostrar la importancia que tienen las anécdotas en nuestra vida y apuntar una serie de claves que ayudarán a analizar las propias y las ajenas.

Para los que vivan en otras comunidades, como ya he abierto la veda de los seminarios, pueden organizar uno en su ciudad, a partir de 20 personas y bajo las mismas condiciones.

Las anécdotas os esperan
http://elarboldorado.com/productos/shungit-la-piedra-inteligente/

La comida, la forma en que percibes la vida

Mientras estaba redactando estas líneas se produjo una anécdota digna de ser reseñada. Una patera alcanzó la playa de una costa española. En ella viajaban un grupo de emigrantes y entre ellos, un bebé de seis meses con su madre.

Se daba la circunstancia que el pequeño se encontraba deshidratado y a su madre se le había cortado la leche debido al esfuerzo del viaje. Una mujer, que también era madre de una niña de escasos meses y estaba tomando el sol en aquella playa, habiendo presenciado la escena, se acercó al grupo y se ofreció para amamantar al bebé. Éste se enganchó con fuerza a aquel pecho adoptivo y quedó saciado.

Las autoridades de la localidad en la que ocurrieron los hechos decidieron condecorar a la mamá adoptiva por su labor humanitaria. Unas horas después del suceso la mujer afirmó en televisión que al principio tenía miedo que el bebé la rechazara, pero que en cuanto empezó a mamar lo sintió como si fuera hijo suyo. Sirva esta tierna anécdota como introducción al tema de la comida.
La primera relación que tenemos con los alimentos se da en el seno materno, dónde captamos todas las substancias que nuestro cuerpo necesita. Cuando salimos de él nos espera -en la mayoría de los casos- la leche materna, por lo que seguimos manteniendo un estrecho contacto con la persona que nos ha estado alimentando durante nueve meses.

A medida que crecemos, los cuidados de los padres van menguando –al principio nos trituran los alimentos y nos dan de comer, y más tarde nos ofrecen unos euros para que vayamos al Burger, sin menoscabo del amor que sienten hacia nosotros. Más bien parece que van dejando un espacio entre ellos y nosotros para que seamos capaces de definir nuestros gustos, para que sepamos lo que queremos y para que finalmente aprendamos a conseguirlo con nuestros propios medios.

Podríamos decir, en cierto modo, que los cambios en los hábitos de la alimentación equivalen a cambios en la forma de percibir la vida, lo que viene del exterior, lo que nos alimenta. Así diríamos que un niño que se nutre exclusivamente con arroces, pastas y patatas fritas, puede tener tendencia a creer que los recursos con los que va a abastecerse en el exterior son limitados y ello restringirá sus posibilidades.

En cambio, una persona con una alimentación amplia y equilibrada tendrá probablemente mejores perspectivas ya que si le falta un ingrediente, sabrá que dispone de muchos otros para confeccionar su guiso, para realizar su obra. Quizá podríamos deducir de todo ello que si a uno le aburre o le disgusta la vida que está llevando, un cambio de dieta es susceptible de aportarle nuevas energías o una visión distinta de lo que está viviendo. Es cuestión de probar...

Según afirmaba Kabaleb en su libro “Cómo descubrir al maestro interior” (Ed. Arcano Books) la comida física simboliza el alimento espiritual. Aplicando esta idea pueden extraerse conclusiones muy jugosas.

El tipo de manjares que a uno le sirven, la forma de prepararlos y presentarlos, la apetencia o rechazo que producen en el consumidor, todos esos detalles constituyen una suculenta fuente de información subliminal acerca de los personajes implicados.

El principal punto de avance del ser humano se basa en la toma de conciencia, es decir, en comprender la realidad que se está viviendo y aplicarle al conocimiento y el sentido común. Partiendo de esta premisa, comprenderemos que es preciso sensibilizarse acerca de la importancia de preparar la comida con amor, con dedicación y con esmero, ya que si el cocinero se encuentra alicaído o de mal humor en el momento de llevar a cabo la transformación alquímica de los alimentos, transmitirá su estado anímico a todo el que coma de su puchero.

Por ejemplo, la dueña de uno de los restaurantes más exquisitos y concurridos del extrarradio madrileño le contó a Soleika (mi hermana) su secreto mejor guardado: energetizaba con Reiki (es una técnica japonesa de transferencia de energía curativa por imposición de manos), o sea con amor, todos sus platos.

La forma de comer de cada persona expresa en cierto modo su personalidad. Por ejemplo, comer con las manos puede ser el reflejo de una necesidad de palpar las experiencias (simbolizadas por la comida) de forma directa, o sea de aproximarse más a la realidad que uno está viviendo, acercándose a las consignas de Santo Tomás, que necesitaba ver para creer.

En ese sentido, los cubiertos serían algo parecido a un intermediario entre la persona y su comida, lo cual ayudaría a tener más perspectiva.
Tristán Llop
http://elarboldorado.com/productos/shungit-la-piedra-inteligente/